Seguir tu pasión y desafiar expectativas: Cielo de Octubre

Cielo de Octubre es una película motivadora basada en hechos reales. Superación, esfuerzo, creatividad y sueños son algunas palabras que definen esta obra. 

Uno de mis recuerdos más significativos es verla en el aula con mis alumnos, mientras estudiábamos la carrera espacial entre Estados Unidos y la Unión Soviética. Esa semana concluimos el proyecto con nuestro propio lanzamiento de cohetes en la cancha. Jamás olvidaré sus caras de emoción al darse cuenta de lo que habíamos logrado.

Tampoco olvidaré lo que sentí al ver por primera vez esta gran historia, justo en un salón de clases casi 20 años antes de verla con mi grupo.

Cuando se habla de pasión normalmente se define como aquello que haríamos aunque no nos pagaran, y en muchos casos es así. Homer Hickman descubrió su pasión en un momento inesperado y para muchos hasta amenazante. Construir cohetes y lanzarlos no era un pasatiempo común en su pueblo minero.

Los jóvenes tenían básicamente dos opciones, estudiar y salir de ahí, o trabajar en la decadente mina y exponerse a un accidente. Sus conocidos lo tenían muy claro, especialmente su padre, el superintendente de la mina de Coalwood en Virginia Occidental, quien rechazaba las ideas “radicales” de su hijo menor, pero apoyaba completamente el sueño de jugar football de su primogénito

Hommer tuvo que tomar una decisión. Complacer los deseos de su padre (ser minero) o hacerle caso a su instinto y tomar el camino difícil (construir cohetes y trabajar en la NASA). Y esa decisión no es para nada sencilla. Todos crecemos en un contexto diferente, pero somos influidos por quienes nos rodean y no queremos decepcionarlos. Cómo vamos a rechazar las órdenes de quien nos dio de comer y nos cuidó hasta la adultez.

Salirse de la ruta establecida por nuestros padres puede ser un duro golpe, pero en muchas ocasiones necesario. No sabremos de lo que somos capaces si nos limitamos a obedecer sin tomar en cuenta nuestros anhelos. He aquí la importancia de aconsejar y escuchar a los hijos y no únicamente trazar un camino a seguir.

El arrepentimiento puede tocar tu puerta con el pasar de los años, pero mientras más tiempo pase, mayor será el impacto que provoque, y para ese momento ya se habrán ido las oportunidades.

La historia de los chicos cohete nos recuerda la importancia de tener sueños e intentar cumplirlos, y cómo habrá muchas personas a nuestro alrededor, apoyándonos, aunque no siempre las que esperamos.

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